Qué emocionante es preparar la bienvenida de tu bebé ¿verdad? No tenemos duda que durante el embarazo has pensado en todos los detalles del parto, pero también es importante que consideres la etapa posterior e inmediata al parto: el posparto.
La transición a la maternidad puede ser desafiante y tener un plan de posparto puede marcar una gran diferencia en tu bienestar físico, emocional y mental.
Aquí te explicamos la importancia de tener un plan para después del nacimiento y cómo puede ayudarte a ti y a tu bebé.
Cuidado y recuperación física después del parto
El posparto es un período en el que tu cuerpo necesita tiempo y atención para sanar. Un plan de posparto te ayudará a establecer un enfoque para cuidarte físicamente. Considera incluir prácticas de autocuidado, como descansar lo suficiente, mantener una alimentación nutritiva, hacer ejercicios suaves y mantener una buena higiene personal. También puedes investigar sobre terapias postparto, como masajes para ayudar a aliviar la tensión y promover la recuperación.
Apoyo emocional y mental en el posparto
La llegada de un bebé trae consigo una montaña rusa de emociones. Es normal sentirse abrumada, agotada o incluso experimentar baby blues. Un plan de posparto te permitirá identificar recursos y apoyos emocionales. Considera hablar con tu pareja, familiares o amigos cercanos sobre tus preocupaciones y necesidades emocionales. También puedes investigar grupos de apoyo para madres o buscar la ayuda de un profesional de la salud mental si es necesario para prevenir o hacer diagnóstico temprano de una depresión posparto.
Fija límites y delega tareas para tu autocuidado
Durante el posparto, es esencial establecer límites y aprender a delegar tareas. No tengas miedo de pedir ayuda a tu pareja, familiares o amigos cercanos. Delegar responsabilidades te permitirá descansar, recuperarte y dedicar tiempo a ti misma y al bebé. Organiza una red de apoyo que te ayude con las tareas del hogar, la preparación de comidas y otras responsabilidades para que puedas centrarte en tu bienestar y en el vínculo con tu bebé.
Establece rutinas y prácticas para tu bienestar
El posparto puede ser un período caótico y lleno de cambios. Un plan de posparto te ayudará a establecer rutinas y prácticas de autocuidado para ti y tu bebé. Considera incluir actividades que te hagan sentir bien, como dar paseos cortos, tomar duchas relajantes o disfrutar de momentos de tranquilidad mientras el bebé duerme. Estas rutinas te brindarán estructura y te ayudarán a cuidar de ti misma en medio de los desafíos diarios.
Conecta con otras madres y familias
El posparto también es un momento para conectarse con otros madres y familias que están pasando por experiencias similares. Busca grupos de apoyo o clases para madres donde puedas compartir tus alegrías y desafíos, obtener consejos y sentirte parte de una comunidad de apoyo. La conexión con otros madres puede brindarte un sentido de pertenencia y la oportunidad de aprender de las experiencias de otros y compartir las tuyas.
Establece metas realistas ajustadas a tu momento vital
Durante el posparto es importante establecer metas realistas y no poner demasiada presión sobre ti misma. Recuerda que cada experiencia es única y que cada madre se adapta a su propio ritmo. No te compares con los demás y celebra cada pequeño logro que alcances. Establece metas alcanzables y recuerda que cuidar de ti misma y de tu bebé es la prioridad.
Comunícate con tu pareja
El posparto también implica un ajuste en la relación de pareja. Es esencial mantener una comunicación abierta y honesta con tu pareja sobre tus necesidades y emociones. Trabajar juntos y apoyarse mutuamente en esta nueva etapa es vital. Podéis establecer momentos especiales para conectar como pareja y recordar que vuestro amor y apoyo son fundamentales en esta transición.
En Dana hemos pensado en ti y te hemos preparado un programa especial para el posparto inmediato. Te dejamos un extracto para que los disfrutes:
Es importante que en el lugar donde des a luz se favorezca el contacto piel con piel inmediato e ininterrumpido tras el parto, al ser una práctica beneficiosa tanto para ti como para tu bebé. El contacto piel con piel está indicado en todos los tipos de nacimiento sin excepción, sea un parto vaginal, instrumentado o una cesárea.
Te recomendamos que sepas cómo fomentan el contacto piel con piel los profesionales que te acompañarán en el nacimiento de tu bebé. En caso de no poder facilitarte el contacto piel con piel tras el nacimiento por alguna situación (porque tú o tu bebé necesitáis asistencia médica urgente), se os debería explicar siempre el motivo y se debería realizar lo antes posible. Si por algún motivo tras el nacimiento no pudieras realizar el contacto piel con piel, también puedes solicitar que sea tu pareja o acompañante quien realice esta práctica.
Sigue leyendo
Ejercicios de recuperación posparto para hacer con tu bebé
Ya tengo a mi bebé en casa. ¿Y ahora qué?
Sara Granado, copy creativa especializada en storytelling, está detrás de la marca La Isla Creativa. Apasionada de la escritura, se hace un sitio y nombre propio en Linkedin contando su propia historia. Escribe en Dana desde su sentir maternal y, colabora en meHRS y la agencia Cúrcuma, con una mirada más creativa y disruptiva.